Madrid, 17 de enero de 2025.- BMW Group España ha cerrado 2024 con cifras impresionantes, alcanzando un total de 66.135 unidades vendidas, lo que representa un incremento del 17,2 % en comparación con el año anterior. Este dato se transforma en un año «excelente» para la marca, que ha logrado establecer una cuota de mercado del 4,2 %, el mayor porcentaje en la historia de la compañía en el país. Este crecimiento no se ha limitado solo a las cifras, sino que también da cuenta de una sólida estrategia comercial y una oferta de productos competitiva.
El director de BMW en España, Eduardo Cortezón, subrayó el éxito de este crecimiento al atribuirlo a una gama de productos muy completa y a una estrategia local bien ejecutada. Las ventas de la marca BMW alcanzaron las 45.184 unidades, lo que supone un aumento del 29,4 %, consolidando a España como el mercado con mayor crecimiento para la marca en el ámbito europeo. «No solo hemos batido récords, sino que seguimos con ambición de crecer aún más en 2025», afirmó Cortezón.
Otro aspecto destacado en el informe anual de BMW es su consolidación como líder en el mercado de vehículos eléctricos en el segmento prémium. Las ventas de vehículos eléctricos del grupo aumentaron un asombroso 50,3 %, alcanzando las 6.190 unidades. Manuel Terroba, presidente ejecutivo de BMW Group España y Portugal, señaló que estos resultados reflejan el éxito de su estrategia de electrificación a pesar de los desafíos que ha presentado el mercado español respecto a la movilidad eléctrica.
En un contexto donde aún persisten dudas sobre la aceptación de los vehículos eléctricos por parte de los consumidores, BMW ha logrado demostrar que innovar y adaptarse a las necesidades de los clientes es clave para la prosperidad. “Estamos muy orgullosos de cómo hemos ganado terreno en un entorno tan competitivo”, agregó Terroba.
La marca MINI también tuvo un año de cambios significativos. Carlos Martínez-Gil, director de MINI España, calificó 2024 como el año «más importante» de la historia de la firma, gracias a la renovación total de su gama de producto. Aunque las matriculaciones cayeron un 10 % hasta 7.808 unidades, la buena noticia radica en que uno de cada cuatro vehículos vendidos fue eléctrico, lo que evidencia un cambio cultural hacia la sostenibilidad. El exitoso lanzamiento del MINI Aceman ha logrado atraer a nuevos consumidores, preservando al mismo tiempo la esencia histórica de la marca.
Por su parte, BMW Motorrad también registró un notable desempeño al superar, por primera vez, las 13.000 unidades vendidas en España, estableciendo un nuevo récord. Alicia Gálvez, directora de la división de motocicletas, destacó que el éxito se debe a modelos icónicos como la BMW R 1300 GS y la reciente BMW CE 02, que se suman a su estrategia de movilidad eléctrica.
En resumen, BMW Group España no solo ha tenido un año de crecimiento notable en ventas, sino que también ha cimentado su liderazgo en el mercado de electromovilidad, marcando un precedente en la industria automotriz nacional. A medida que avanzamos en 2025, parece que la marca está más que lista para continuar esta senda ascendente en un sector en constante evolución.
El notable crecimiento de BMW Group España, con un incremento del 17,2 % en ventas y su liderazgo en electromovilidad, son cifras que reflejan un momento de esplendor para la marca. Sin embargo, este éxito no debe enmascarar el hecho de que el contexto de la movilidad sostenible sigue siendo incierto. La proliferación de vehículos eléctricos, aunque celebrada, debe ser acompañada de una infraestructura adecuada que respalde su uso. A pesar de las cifras positivas, persisten preguntas críticas: ¿están las ciudades españolas realmente preparadas para este cambio? ¿Qué medidas concretas se están implementando para que la transición hacia la electrificación sea accesible y eficiente para el ciudadano común? La ambición de BMW debe ir de la mano de un compromiso social que garantice que su éxito no sea solo un fenómeno de mercado, sino un verdadero paso hacia un futuro sostenible.
Por otro lado, el desafío que enfrenta MINI con la caída del 10 % en matriculaciones a pesar del lanzamiento de modelos innovadores indica que el mercado de vehículos eléctricos no es una panacea. La caída en ventas contrasta con las tendencias presentadas por BMW, lo que sugiere que la marca necesita replantearse su estrategia para MINI. Mantener la esencia histórica de la marca es importante, pero sin una comprensión clara de las necesidades cambiantes del consumidor, estos esfuerzos pueden resultar insuficientes. En este sentido, la diversificación de su oferta hacia modelos más accesibles y sostenibles podría ser la clave para revitalizar la marca y conectar de manera efectiva con la nueva generación de compradores. Sin duda, el sector automotriz en España se encuentra en un cruce de caminos, y es responsabilidad de los líderes como BMW ser pioneros no solo en ventas, sino también en crear un legado duradero y responsable.
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