El proyecto de construcción de la desalobradora en Vélez-Málaga representa un paso crucial en la lucha contra la escasez de agua que afecta a la región. Con una inversión de 15 millones de euros, esta infraestructura permitirá tratar el agua de los pozos de forma eficiente, eliminando la sal y convirtiéndola en un recurso apto para el riego de los cultivos locales. Esta iniciativa no solo beneficiará al municipio de Vélez-Málaga, sino que también tendrá un impacto positivo en localidades vecinas como Algarrobo.
La colaboración entre el Ayuntamiento de Vélez-Málaga, la Diputación de Málaga y la Junta de Andalucía es fundamental para llevar a cabo este proyecto de vital importancia. La sequía que azota la región ha puesto en evidencia la necesidad de encontrar soluciones sostenibles para garantizar el abastecimiento de agua tanto para el consumo humano como para la agricultura. La desalobradora no solo contribuirá a mejorar la calidad del agua, sino que también permitirá optimizar su uso en un contexto de recursos hídricos limitados.
Además de proporcionar agua de calidad para el riego de los campos de subtropicales, como el aguacate y el mango, la desalobradora también tendrá un impacto positivo en las costas de la región. La mejora de las condiciones hídricas permitirá preservar los ecosistemas locales y garantizar un suministro adecuado de agua para las actividades turísticas. En definitiva, esta infraestructura representa una oportunidad para avanzar hacia un modelo de desarrollo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente en la comarca de la Axarquía.
El proyecto de construcción de la desalobradora en Vélez-Málaga es sin duda una iniciativa crucial para hacer frente a la escasez de agua que afecta a la región. Con una inversión significativa, esta infraestructura permitirá tratar el agua de forma eficiente y convertirla en un recurso apto para el riego de los cultivos locales, beneficiando no solo a Vélez-Málaga, sino también a localidades vecinas como Algarrobo. La colaboración entre las diferentes instituciones para llevar a cabo este proyecto es fundamental y demuestra la importancia de trabajar juntos para encontrar soluciones a los problemas hídricos que enfrenta la región.
La desalobradora no solo mejorará la calidad del agua y su uso eficiente en la agricultura, sino que también tendrá un impacto positivo en los ecosistemas locales y en las actividades turísticas de la región. Esta infraestructura representa una oportunidad para avanzar hacia un desarrollo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente en la comarca de la Axarquía. En un contexto de recursos hídricos limitados y sequías cada vez más frecuentes, es crucial seguir apostando por proyectos como este que contribuyan a garantizar un suministro adecuado de agua para todos los sectores de la sociedad.
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