Durante los últimos días, el ambiente político en Cataluña se ha vuelto cada vez más tenso a medida que ERC y el PSC intercambian mensajes y condiciones sobre la negociación de la investidura. Mientras que ERC ha dejado claro que exige una financiación singular como paso previo a un referéndum, Salvador Illa ha respondido con un llamado a la humildad y a tener los pies en la tierra en las negociaciones.
El líder socialista ha recordado el resultado de las elecciones del 12 de mayo, donde el PSC salió victorioso arrebatándole 13 escaños a ERC. Esta victoria parece haber dado al PSC un impulso de confianza en las negociaciones, recordándole a Esquerra que sus demandas no cuentan con un respaldo mayoritario en las urnas.
La confrontación entre ambas partes ha llegado a un punto álgido, con críticas mutuas sobre la soberanía fiscal y política. Mientras Marta Rovira ha utilizado un tono vehemente al dirigirse a los socialistas, Illa ha respondido criticando la actitud de ERC y recordando que Cataluña pertenece a todos, sin privilegios para nadie. A pesar de las diferencias, Illa ha dejado claro que sigue aspirando a lograr los votos necesarios para lograr la presidencia, mostrando optimismo en sus posibilidades y llamando a la paciencia en las negociaciones.
En el contexto de las elecciones europeas, el PSC ha hecho hincapié en su papel como voto útil progresista para frenar al PP y hacer frente a la extrema derecha en España. Teresa Ribera, vicepresidenta y candidata del PSOE a dichas elecciones, ha respaldado a Illa como presidente y ha enfatizado la importancia de votar por los socialistas para enviar un mensaje a Europa de que España es un país progresista. En medio de la división de otros partidos de izquierda, el PSC se presenta como la opción que puede contener el avance de la extrema derecha y garantizar un resultado positivo en las urnas.
La situación política en Cataluña se ha vuelto cada vez más tensa a medida que ERC y el PSC entran en una disputa por las condiciones de la investidura. Mientras ERC exige una financiación singular como paso previo a un referéndum, Salvador Illa y el PSC han respondido con un llamado a la humildad y a tener los pies en la tierra en las negociaciones. La confrontación entre ambas partes ha llegado a un punto álgido, con críticas mutuas sobre la soberanía fiscal y política, mostrando la distancia entre ambas formaciones y la dificultad de llegar a un acuerdo que satisface a ambas partes.
En este contexto, el PSC ha aprovechado su victoria electoral para fortalecer su posición en las negociaciones, recordando a ERC que sus demandas no cuentan con un respaldo mayoritario en las urnas. Por otro lado, los socialistas han hecho hincapié en su papel como voto útil progresista para frenar al PP y la extrema derecha, presentándose como la opción que puede contener su avance en las elecciones europeas. Con la división de otros partidos de izquierda, el PSC busca consolidar su posición y asegurar un resultado positivo en las urnas, tanto a nivel nacional como europeo.
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