La situación de sequía que afecta a Torremolinos y a la Costa del Sol es un tema de gran preocupación para las autoridades locales y la población en general. Ante esta situación, el Ayuntamiento ha decidido emitir un bando para informar a los ciudadanos sobre las medidas que se deben tomar para combatir la escasez de agua. La alcaldesa Margarita del Cid ha firmado este comunicado en el que se establecen las pautas a seguir durante los próximos meses.
Una de las medidas más destacadas en el bando es la autorización excepcional para el rellenado parcial de piscinas, tanto públicas como privadas, siempre y cuando cuenten con un sistema de recirculación de agua. Esta medida busca mantener los niveles de agua necesarios para garantizar la calidad sanitaria de las piscinas, así como para reponer las pérdidas por evaporación y limpieza de filtros.
Además, se permite el funcionamiento de duchas en establecimientos deportivos y piscinas donde su uso sea obligatorio, siempre y cuando cuenten con dispositivos de ahorro de agua. También se autoriza el uso de surtidores públicos para beber, con sistemas de pulsador o sensores para controlar el consumo de agua. Estas medidas tienen como objetivo concienciar a la población sobre la importancia de utilizar el agua de forma responsable en tiempos de sequía.
Por último, el bando también contempla la autorización para el riego de supervivencia en jardines, con una cantidad limitada de agua por mes y hectárea. Esta medida busca preservar la vegetación en espacios públicos y privados, asegurando que las plantas reciban la cantidad necesaria de agua para su supervivencia. En definitiva, el Ayuntamiento de Torremolinos busca promover el uso responsable del agua entre los ciudadanos, con el fin de mitigar los efectos de la sequía en la región.
La situación de sequía que afecta a Torremolinos y la Costa del Sol es un tema de gran preocupación que requiere medidas urgentes por parte de las autoridades locales. El bando emitido por el Ayuntamiento, aunque valioso en términos de concienciación, plantea algunas medidas que podrían resultar insuficientes para hacer frente a la gravedad de la situación. La autorización para el rellenado parcial de piscinas, por ejemplo, podría ser cuestionada en un contexto de escasez de agua, ya que el consumo en este tipo de instalaciones no es prioritario en momentos de sequía.
Si bien es importante concienciar a la población sobre la importancia de utilizar el agua de forma responsable, es fundamental que las medidas adoptadas por el Ayuntamiento vayan más allá de simples recomendaciones. Es necesario implementar acciones concretas y eficaces que garanticen un uso sostenible y equitativo del recurso hídrico en la región. En este sentido, sería conveniente establecer restricciones más estrictas y promover el uso de tecnologías y prácticas más eficientes en el consumo de agua, con el objetivo de preservar este recurso vital para las generaciones futuras.
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