El conflicto laboral entre el Sindicato Libre de Transporte y la UTE Urbano Fuengirola ha alcanzado un nuevo nivel con el anuncio de la intensificación de los paros parciales en el servicio municipal de transportes a partir de mañana. Esta decisión surge como respuesta a la falta de acuerdo entre ambas partes en cuanto a la equiparación salarial de los trabajadores subrogados de la anterior concesionaria y los nuevos contratados, cuya diferencia alcanza los 15.000 euros anuales.
La situación se ha agravado aún más debido a la alta demanda de transporte público en Fuengirola, que se ha triplicado desde que el Ayuntamiento implementó la gratuidad del servicio para los empadronados. Esta medida ha generado un aumento significativo en los costes para la UTE, que ahora busca compensar las pérdidas recortando los salarios de los trabajadores, según denuncia el Sindicato Libre de Transporte.
La problemática se centra en la forma en que se remunera el servicio de transporte, ya que el Ayuntamiento de Fuengirola paga por kilómetro y no por viajero. Para el SLT, esta modalidad de pago no tiene en cuenta el aumento considerable de pasajeros y el impacto directo en los gastos operativos de la empresa concesionaria. Ante esta situación, los trabajadores han decidido endurecer su postura y llevar adelante una huelga en busca de condiciones laborales justas y equitativas.
En este contexto, la mesa de contratación ha sido señalada por el sindicato como responsable de avalar una oferta temeraria que ha desencadenado una serie de consecuencias negativas para los empleados del servicio de transporte municipal. Mientras tanto, los usuarios se ven afectados por la interrupción parcial del servicio, lo que genera malestar en la población y presiona a las autoridades locales a buscar una solución urgente y satisfactoria para todas las partes involucradas.
El conflicto laboral entre el Sindicato Libre de Transporte y la UTE Urbano Fuengirola demuestra una vez más las dificultades que enfrentan los trabajadores en busca de condiciones laborales justas y equitativas. La disparidad salarial entre los empleados subrogados y los contratados recientemente es una clara muestra de la falta de voluntad de la empresa concesionaria para garantizar la igualdad de trato. La intensificación de los paros parciales es una clara señal de la necesidad de resolver este conflicto de manera urgente y justa para ambas partes.
La falta de acuerdo entre el sindicato y la UTE, sumado a la falta de sensibilidad por parte del Ayuntamiento de Fuengirola hacia las condiciones laborales de los trabajadores, pone en evidencia la fragilidad de las relaciones laborales en el sector del transporte. Es necesario que las autoridades locales intervengan de manera inmediata para buscar una solución que no solo garantice la continuidad del servicio de transporte público, sino también la justicia social y laboral para los empleados afectados. La mesa de contratación debe revisar urgentemente su decisión y asegurarse de que se respeten los derechos de los trabajadores en este conflicto.
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