El alcalde de Antequera, Manolo Barón, ha manifestado la urgente necesidad de acelerar el desdoblamiento del tramo de la carretera A-384 que conecta el emergente Puerto Seco con la autovía A-92. Este proyecto se torna crucial para potenciar la capacidad logística de la localidad, posicionándola como un potente hub logístico en Andalucía. Durante una reciente reunión con consignatarios del Puerto de Málaga, el regidor destacó que las mejoras en infraestructura son fundamentales para fortalecer los lazos comerciales y mejorar la transitabilidad de mercancías en la región.
Barón subrayó la visión estratégica del Puerto Seco de Antequera, al señalar su potencial para convertirse en el eje logístico más importante de la comunidad autónoma. “Para ello, necesitamos unas comunicaciones excepcionales que faciliten el flujo de mercancías. El desdoblamiento de la A-384 es una parte esencial de esta estrategia”, puntualizó el alcalde. Con una intensidad media de 6.000 vehículos al día, de los cuales un 8% son pesados, se evidencia la alta demanda de una carretera que no solo cumple un rol en el transporte local, sino que se ha convertido en un punto neurálgico para el desarrollo económico de la zona.
Durante la visita de los consignatarios al Puerto Seco, se puso de manifiesto la colaboración entre los puertos y los operadores logísticos. La delegada en España del Grupo IDEC, Maite Palomino, expresó la necesidad de expansión del Puerto de Málaga y cómo el Puerto Seco de Antequera podría ofrecer una salida natural para la logística de la capital. “Estamos hablando de un nuevo paradigma logístico que no solo se enfoca en la expansión, sino en la sostenibilidad. La infraestructura que estamos desarrollando en el Puerto Seco estará dotada de energía verde y sistemas de control de temperatura que serán clave para el manejo de productos frescos”, afirmó Palomino, destacando la especialización de Málaga en este sector.
La primera fase del Puerto Seco, inaugurada en abril, implicó una inversión inicial de 50 millones de euros y abarca más de 100 hectáreas de terreno, prometiendo ser un espacio atractivo para diversas empresas logísticas, incluyendo gigantes como Amazon. Juan José Sibina, gerente de la Asociación de Consignatarios de Buques y Empresas Portuarias de Málaga, señaló que la cercanía del Puerto Seco a Málaga es un factor “vital” para atraer nuevas inversiones. “Las empresas buscan espacios que les ofrezcan eficiencia y proximidad a los grandes centros urbanos. Aquí, en Antequera, tenemos la posibilidad de satisfacer esa demanda”, expresó Sibina.
El potencial del Puerto Seco de Antequera no solo se ve reflejado en la infraestructura, sino también en las oportunidades que brinda para el desarrollo económico local. La comunicación efectiva entre el Puerto y el resto de Andalucía se convierte en un requisito indispensable para maximizar el rendimiento de las actividades logísticas. El desdoblamiento de la A-384, por lo tanto, no es solo una cuestión de infraestructura, sino de vislumbrar un futuro donde Antequera se afirme como un modelo de competitividad y modernidad en el desarrollo logístico. Esta iniciativa promete sentar las bases de un crecimiento sostenido, favoreciendo tanto a empresas como a trabajadores locales, impulsando un ciclo de prosperidad que beneficiará a toda la región.
El impulso que Antequera busca dar a su logística con el desdoblamiento de la A-384 es un paso necesario y anhelado, sin embargo, no podemos olvidar que estas iniciativas requieren un enfoque más integral que vaya más allá de los intereses económicos inmediatos. Si bien es cierto que la mejora de la infraestructura es fundamental para el desarrollo local, es igualmente necesario considerar el impacto ambiental y social que pueden tener estas obras. Hay que preguntarse si la prisa por fomentar el crecimiento económico no dejará de lado la calidad de vida de los residentes y las consecuencias para el entorno. Fomentar un hub logístico no puede hacerse a costa del bienestar de la comunidad que, en última instancia, es la que debería beneficiarse de estos desarrollos.
Además, la colaboración entre los puertos y los operadores logísticos, como se ha mencionado, es un punto a favor, pero es esencial que esta cooperación esté acompañada de un compromiso hacia la sostenibilidad y la creación de empleos de calidad. La promesa de que el Puerto Seco será un espacio dotado de energía verde y eficiencia es encomiable, pero queda en el aire si esto realmente servirá para contrarrestar los efectos negativos del aumento del tráfico y la industrialización de la zona. Las futuras decisiones sobre la infraestructura de transporte en Antequera deberían priorizar una visión que integre desarrollo, sostenibilidad y el bienestar de sus ciudadanos. Solo así se podrá asegurar que el futuro de Antequera no solo sea próspero, sino también equitativo y sostenible para todos.
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