La Fundación San Lázaro ha dado un paso adelante en su labor solidaria al reforzar el Programa Faro en colaboración con Marbella Voluntaria. Este programa, que lleva en funcionamiento desde 2003, se enfoca en atender a personas mayores que sufren la soledad impuesta y a aquellas con diversidad funcional. Gracias a esta alianza, se podrá brindar un apoyo más concreto a estas personas, cubriendo sus necesidades básicas como alimentos, productos de higiene y asistencia para promover su autonomía.
Los voluntarios del Programa Faro, impulsado por el Ayuntamiento de Marbella, desempeñan un papel crucial al realizar un seguimiento cercano de las personas mayores, tanto de forma presencial como telefónica. Esta acción preventiva busca evitar el aislamiento de aquellos que tienen dificultades para salir de sus hogares o que pasan largos periodos sin recibir visitas. Gracias a esta labor, se logra ofrecer una red de apoyo emocional y práctico a aquellos que más lo necesitan.
Además, la entrega de productos de primera necesidad a través del programa ‘Comer es lo primero’ representa un gesto de solidaridad y compromiso con la comunidad. La colaboración entre la Fundación San Lázaro y Marbella Voluntaria demuestra que juntos se puede hacer frente a las situaciones de vulnerabilidad y ofrecer soluciones efectivas para mejorar la calidad de vida de los colectivos más desfavorecidos. Sin duda, este acuerdo sienta las bases para una acción social más coordinada y efectiva en beneficio de la sociedad marbellí.
La colaboración entre la Fundación San Lázaro y Marbella Voluntaria para reforzar el Programa Faro es sin duda una excelente noticia en tiempos de crisis y dificultades sociales. Este programa, que se centra en atender a personas mayores y con diversidad funcional que sufren de soledad y falta de apoyo, demuestra el compromiso de ambas organizaciones por mejorar la calidad de vida de los colectivos más vulnerables en Marbella. La labor de los voluntarios, que realizan un seguimiento cercano y ofrecen apoyo emocional y práctico, es fundamental para romper el aislamiento y la exclusión social de estas personas.
La entrega de productos de primera necesidad a través del programa ‘Comer es lo primero’ es un gesto solidario que demuestra la importancia de la colaboración entre entidades públicas y privadas para dar respuesta a las necesidades más urgentes de la comunidad. Esta alianza es un ejemplo de cómo la sociedad civil puede unirse para ofrecer soluciones efectivas y mejorar la vida de aquellos que más lo necesitan. En definitiva, esta acción conjunta sienta las bases para una acción social más coordinada y eficaz en Marbella, mostrando que la solidaridad y la empatía son fundamentales para construir una sociedad más justa y equitativa.
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