Renfe ha sido duramente criticada por la Asociación de Consumidores y Usuarios en Red (Consumur) por el nuevo servicio de AVE que conecta Murcia y Málaga. Según Consumur, este trayecto ha resultado ser un verdadero fracaso debido a su duración de casi 7 horas y las once paradas que realiza, incluyendo paradas en Alicante, Albacete, Madrid, Ciudad Real y Córdoba.
La asociación ha expresado su descontento con los horarios poco convenientes de salida, que no se ajustan a las necesidades de los viajeros que podrían utilizar este servicio por motivos laborales. En lugar de adaptarse a un perfil de viajero más enfocado en el turismo, Consumur considera que Renfe debería ofrecer horarios más flexibles y un itinerario más directo.
Además, Consumur ha solicitado a Renfe que revele el número de pasajeros que utilizan esta línea, pero la empresa se ha negado argumentando que se trata de un servicio comercial sin subvenciones públicas y que revelar esta información podría perjudicarles en un mercado competitivo. El presidente de Consumur, Roberto Barceló, ha calificado este servicio como una «aberración» debido a su alto precio, duración inadecuada y falta de sentido en el trazado.
En medio de estas críticas, Renfe no ha emitido ninguna declaración al respecto, dejando en el aire la posibilidad de que se realicen cambios en este servicio para satisfacer las demandas de los usuarios. Mientras tanto, Consumur continuará presionando a la compañía ferroviaria para que tome medidas que mejoren la calidad y eficiencia de esta conexión entre Murcia y Málaga.
La polémica generada en torno al nuevo servicio de AVE que conecta Murcia y Málaga ha resaltado la insatisfacción de los usuarios y la falta de adaptación de Renfe a las necesidades de los mismos. Consumur ha puesto de manifiesto las deficiencias en la duración, número de paradas y horarios poco convenientes de salida de este trayecto, cuestionando la viabilidad y utilidad de esta conexión. La negativa de Renfe a revelar el número de pasajeros y su falta de respuesta a las críticas plantean interrogantes sobre la transparencia y la disponibilidad de la empresa para mejorar sus servicios.
Ante esta situación, es evidente que Renfe debe reconsiderar su estrategia y escuchar las demandas de los usuarios para ofrecer un servicio de calidad y eficiente. Las críticas de Consumur no deben ser ignoradas, ya que representan la voz de los consumidores y evidencian la necesidad de realizar cambios significativos en este servicio. Es necesario que Renfe tome medidas concretas para mejorar la conexión entre Murcia y Málaga, adaptándose a las demandas de los viajeros y garantizando un servicio eficaz y competitivo en el mercado ferroviario.
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