En medio de un ambiente de tensión y controversia, el Consejo de Administración de la Sociedad Municipal de Aparcamientos de Málaga (SMASSA) ha dado luz verde a la indemnización de 22.300 euros netos al exgerente Manuel Díaz. Este acuerdo, que ha sido firmado con el voto en contra de la oposición en el Ayuntamiento malagueño, pone fin a un largo proceso judicial desencadenado por las irregularidades en la contratación durante el mandato de Díaz.
La propuesta de acuerdo extrajudicial sobre la liquidación e indemnización del exgerente ha sido duramente discutida y debatida en el seno del Consejo de Administración. Mientras que los consejeros del gobierno municipal del PP y de los consejeros de la parte privada de la sociedad han respaldado la propuesta, los consejeros de los grupos municipales de la oposición han manifestado su desacuerdo, argumentando que el despido de Díaz era procedente debido a las irregularidades en su gestión.
Por su parte, la vicepresidenta del Consejo de Administración ha sido la encargada de liderar las negociaciones para llegar a un acuerdo económico que satisfaga a ambas partes. Tras intensas discusiones y debates, se ha logrado consensuar una cifra de indemnización que ponga fin a este conflicto laboral y judicial. Es importante destacar que la relación laboral de Manuel Díaz con la empresa se ha considerado especial y no ordinaria, lo que ha influido en la decisión de indemnizarlo por despido improcedente.
En un intento por resolver este conflicto de manera amistosa y evitar un largo y costoso litigio judicial, ambas partes han acordado solicitar al juzgado la aprobación judicial de la conciliación alcanzada. Este paso marca el comienzo de una nueva etapa para la Sociedad Municipal de Aparcamientos de Málaga, que busca superar esta difícil situación y enfocarse en su labor diaria de proporcionar un servicio de calidad a los ciudadanos malagueños.
La decisión del Consejo de Administración de la SMASSA de indemnizar al exgerente Manuel Díaz con 22.300 euros netos ha generado un fuerte debate y división en el seno de la entidad. Mientras que los representantes del gobierno municipal y de la parte privada han respaldado la propuesta, la oposición ha manifestado su desacuerdo, argumentando que el despido de Díaz era justificado por las irregularidades en su gestión. Esta situación pone de manifiesto las tensiones políticas y la falta de consenso en la toma de decisiones clave para el buen funcionamiento de la sociedad.
Si bien la resolución amistosa del conflicto laboral y judicial es un paso positivo hacia la estabilidad y la resolución de este problema, la decisión de indemnizar a un exgerente cuya gestión ha sido cuestionada plantea preguntas sobre la responsabilidad y la transparencia en la administración pública. Es fundamental que las instituciones actúen con claridad y coherencia en la gestión de recursos públicos, garantizando la rendición de cuentas y la eficacia en la toma de decisiones para el beneficio de la ciudadanía. Esta noticia evidencia la necesidad de un mayor control y supervisión en la gestión de entidades públicas como la SMASSA para evitar situaciones similares en el futuro.
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