La situación hídrica en la provincia de Málaga sigue siendo motivo de preocupación y debate, especialmente en los municipios del interior que ya comienzan a contemplar la posibilidad de intensificar los cortes de agua. Ante un otoño escaso en lluvias, la Diputación ha aprobado la inversión de 6,2 millones de euros en obras de emergencia para combatir la sequía.
En este sentido, se han ejecutado distintas actuaciones en los colectores de municipios como Marbella, Vélez-Málaga, Estepona y Algarrobo, con el objetivo de mejorar el aprovechamiento de las aguas regeneradas y eliminar intrusiones salinas en las tuberías. La salinidad ha complicado el uso de estas aguas en el riego agrícola, campos de golf y jardines, fundamentales para mantener el turismo y el bienestar de la población.
En el pleno provincial de la Diputación, se ha puesto de manifiesto la importancia de concienciar a la ciudadanía sobre el consumo moderado del agua. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha hecho hincapié en la necesidad de ser respetuosos con este recurso y ha recordado la existencia de una ordenanza municipal que prohíbe ciertos usos indebidos del agua, con multas de hasta 750 euros por infracciones leves. La sequía no ha terminado y es crucial mantener una actitud responsable para garantizar el abastecimiento en los meses venideros.
La situación hídrica en la provincia de Málaga es una problemática que cada vez cobra más relevancia, especialmente en los municipios del interior que comienzan a padecer cortes de agua. La aprobación por parte de la Diputación de una inversión de 6,2 millones de euros en obras de emergencia es una medida necesaria, pero no suficiente para hacer frente a la sequía que afecta a la región. Es fundamental que se implementen políticas a largo plazo que fomenten un uso responsable del agua y que se busquen soluciones sostenibles para garantizar el abastecimiento a todos los ciudadanos.
Además, la salinidad de las aguas regeneradas en municipios como Marbella, Vélez-Málaga, Estepona y Algarrobo evidencia la urgencia de mejorar la gestión del recurso hídrico en la región. La concienciación ciudadana sobre la importancia de consumir de forma moderada el agua es clave para enfrentar esta crisis, por lo que resulta alentador el recordatorio del alcalde de Málaga sobre la existencia de una ordenanza municipal que prohíbe ciertos usos indebidos. En definitiva, es imprescindible que las autoridades competentes y la sociedad en su conjunto trabajen de manera coordinada y responsable para superar los desafíos que plantea la sequía en la provincia.
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