El caso Supercopa sigue dando de qué hablar, esta vez con la citación como investigado del abogado Tomás González Cueto, reconocido por ser el ‘cerebro’ jurídico del ex presidente de la RFEF, Luis Rubiales. Cueto, hasta hace poco abogado externo de la Federación, ha sido señalado como una pieza clave en la trama que investiga la jueza de Primera Instancia e Instrucción 4 de Majadahonda. Según las investigaciones de la Guardia Civil, Cueto habría utilizado su posición en la Federación para influir en decisiones de la directiva, facturar pagos extraordinarios de forma independiente y canalizar comisiones de forma irregular.
Las sospechas sobre las actividades de Cueto se intensifican con la revelación de contratación de agencias de detectives para servir a los intereses personales de Rubiales, así como su posible responsabilidad en la canalización de comisiones. Además, su condición de comisionado de Control Externo, nombrado por el presidente dimitido, añade un componente de conflicto de interés a la investigación en curso.
La figura de Cueto, considerada la mano derecha jurídica de Rubiales, ha estado presente en múltiples causas judiciales relacionadas con la Federación, lo que apunta a una relación estrecha y duradera entre ambos. A pesar de haber sido detenido en la operación Brodie y posteriormente despedido de la RFEF, Cueto mantenía un puesto remunerado y de prestigio en la FIFA hasta hace poco. Su negativa a declarar en su momento se debió a la falta de comunicación sobre su despido, lo que, según él, le impedía actuar en contra de los intereses de su cliente. Sin embargo, ahora tendrá la oportunidad de enfrentarse a las acusaciones y dar su versión de los hechos ante la justicia.
El caso Supercopa ha vuelto a poner en tela de juicio la ética y transparencia en el ámbito del fútbol español, con la citación como investigado del abogado Tomás González Cueto, quien ha sido señalado como una pieza clave en una presunta trama de influencia y corrupción en la Federación. Las acusaciones de facturación de pagos extraordinarios de forma independiente y canalización de comisiones de manera irregular ponen en entredicho la integridad de Cueto y su relación con el ex presidente Rubiales.
La revelación de la contratación de agencias de detectives para servir a los intereses personales de Rubiales y la posible responsabilidad de Cueto en este tipo de acciones, así como su condición de comisionado de Control Externo designado por el presidente dimitido, añaden un componente de conflicto de interés a la investigación en curso. La figura de Cueto, quien ha mantenido una estrecha relación con Rubiales a lo largo de múltiples causas judiciales, ahora deberá enfrentarse a las acusaciones y dar explicaciones ante la justicia, lo que sin duda arrojará luz sobre la verdadera naturaleza de su papel en esta trama.
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